La Plaza Bolívar, también conocida Plaza del Congreso o Plaza de la
Inquisición por ubicarse en ella tanto el local del Congreso de la República
del Perú como el antiguo local del Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición
(actual Museo de la Inquisición y el Congreso) es una plaza ubicada en los
Barrios Altos del centro histórico de Lima, capital del Perú.
Se ubica en la segunda cuadra de la
avenida Abancay a tres cuadras al este de la Plaza Mayor de Lima. La estatua de
Simón Bolívar, Libertador de seis países (Venezuela, Colombia, Ecuador, Panamá,
Perú y Bolivia), motiva que en los aniversarios patrios de dichas naciones, se
realicen homenajes en esta plaza.
La plaza es una de las más antiguas de la ciudad ya que existe desde el siglo XVI. En los primeros años de vida de la ciudad, durante el siglo XVI, existió en ella un estanque de poca profundidad lo que motivó que su primer nombre fuera justamente Plaza del Estanque. Durante el gobierno del virrey Diego López de Zúñiga y Velasco, Conde de Nieva, se construyó con base en dicho estanque una caja de agua (llamada de la Caridad por la iglesia Santa María de la Caridad que se construyó durante esos años) como parte de su proyecto de proveer a la ciudad con agua potable.
También se le conocía como plaza de
Nicolás de Rivera El Mozo ya que en los años 1560 se ubicaba en ella la
propiedad de este personaje en el solar ubicado en el frente sur de la plaza.
Durante el gobierno del virrey Andrés Hurtado de Mendoza, segundo Marqués de
Cañete, se dispuso la construcción en su frente oriental de la casa de mestizas
San Juan de la Penitencia.
En 1562 se construyó en ese mismo solar
la Iglesia y hospital de Santa María de la Caridad. Posteriormente en 1577 se
ubicó el local de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Esto hizo que a
la plaza le correspondieran también los nombres de Plaza de la Caridad y Plaza
de la Universidad. Hacía fines del siglo XVI, con la institución en Lima de la
Inquisición se denominó a la plaza como Plaza de las Tres Virtudes Cardinales1
o, más comúnmente, como Plaza de la Inquisición. Esta última forma se sigue
utilizando en la actualidad.
Durante la época virreinal, la plaza
tenía una forma trapezoidal, ensanchándose hacia su frente oriental. En el
centro de la misma existía una fuente que tenía origen en la caja de agua que
mandó construir el virrey Conde de Nieva, y que en cuyo centro se levantaba una
cruz de piedra. Las fuentes de aquellos años señalaban que la existencia del
mercado de abastos ofrecía una vista muy desagradable y descuidada. En el año
1822, al instalarse el Congreso Constituyente del Perú en el local de la Universidad,
se dispuso el traslado del mercado. A partir de ese hecho, la plaza fue
rebautizada por Bernardo de Monteagudo como Plaza de la Constitución. Este
nombre fue establecido mediante decreto promulgado el 6 de julio de 1822.
El 8 de diciembre de 1825 se colocó la
primera piedra del proyectado monumento a Bolívar. La ceremonia se inició a las
5 de la tarde en el Palacio de Gobierno del Perú desde donde se dirigieron a la
Plaza de la Constitución. Este monumento recién se terminó más de treinta años
después. En 1853 el Congreso realizó un concurso y la escultura ganadora llegó
al Callao en 1859. Este monumento motivó que, desde mediados del siglo XX, la
Plaza fuera conocida como Plaza Bolívar.
A inicios del siglo XX la fisonomía de
la plaza cambió sensiblemente ya que no sólo se amplió la misma sino que además
se derruyeron los edificios que antiguamente albergaban a la iglesia y el
hospital de Santa María de la Caridad y parte de la Universidad San Marcos para
la futura construcción del Palacio Legislativo del Perú, trazándose la segunda
cuadra del jirón Simón Rodríguez, y la segunda y tercera cuadra del jirón
Andahuaylas. En su frente sur, sólo se mantuvo en pie la fachada del Senado de
la República, antiguo Tribunal de la Inquisición cuya fachada virreinal fue
modificada en el año 1897 siendo reemplazada por la actual, de estilo
neoclásico.
En 1947 la plaza fue sustancialmente
transformada al iniciarse los trabajos de ensanchamiento del jirón Abancay (hoy
avenida). En los años 1980, a raíz de los constantes ataques terroristas que se
dieron en el país, con la finalidad de evitar atentados en el local del
Congreso, la Plaza Bolívar fue enrejada y cercada y su acceso restringido. En
1997 el Congreso instituyó la ceremonia de izamiento del Pabellón Nacional con
la participación de los presidentes de las comisiones parlamentarias, sin
embargo, esta ceremonia cayó en desuso rápidamente.
Si bien en 1825 el Congreso del Perú
dispuso la construcción de un monumento a Simón Bolívar en esta plaza y ese
mismo año se colocó la primera piedra de dicho monumento, pasaron treinta años
hasta que la efigie fuera efectivamente dispuesta en la plaza. En 1853 el
Congreso encargó a Bartolomé Herrera, quien era Ministro Plenipotenciario del
Perú en Roma, la misión de convocar a un concurso para la confección de la
estatua y del pedestal. El ganador fue el escultor italiano Adamo Tadolini,
quien confeccionó un molde de yeso. Sobre ese molde, un escultor alemán de
apellido Müller, superintendente de la fundición de Múnich, se encargó de la
fundición de la estatua. El pedestal de mármol fue obra del artista romano
Felipe Guacarini.
El monumento terminado
en 1858, recién llegó al Perú en 1859. De cuatro metros de altura y veintitrés
toneladas de peso, la estatua muestra a Bolívar montado en un caballo
encabritado que se sostiene sobre sus patas traseras. El pedestal posee tres
gradas. Sobre el lado derecho del pedestal, un alto relieve representa la
Batalla de Ayacucho. Sobre el lado izquierdo otro alto relieve representa la
Batalla de Junín. En la parte de atrás del pedestal se muestra el Escudo del
Perú. En la parte frontal se encuentra una placa con la inscripción:
No hay comentarios:
Publicar un comentario