COLAS, CODAZOS Y TARIFAS

Lima, mi Lima uerida, nunca nos dejara e sorprender. Con mucha frecuencia hablamos de la capacidad creativa de sus habitantes, ya sea para ganarse la vida o para sacarle la vuelta a la ley. Alg o mucho de esto, obviamente, sucede en todas partes. Aca por alguna razon parece suceder mas. Y a todo nivel. Si no, basta ver el comportamient del consorcio de empresas que tiene el contrato del Metropolitano o la manera como se viene gestionando el asunto.
Para empezar, es cierto que el contrato de concesion del servicio que se firmo en la gestion anterior le otorga a las empresas, queriendo o sin querer, una mayoria automatica y permanente a la hora de decidir las tarifas. Es verdad tambien que las empresas no pueden excederse de determinados limites , pero tal como estan echados  los dados, la Mnicipalidad se queda sin posibilidad alguna  de decidir nada.
Esto, en un escenario de contratos de servicios publicos al sector privado, es una rareza digna de analizarse. Porlo general en aquellos lugares  donde el estado o la autoridad local ceden  o comparten  servicios sensibles y basicos con la empresa privada se hace sobre determinadas bases. La ultima paabra la tiene el Estado o a autoridad, porque el fin ultimo es servir  al ciudadano. Para hacer las cosas mas parejas  la autoridad concede un usufructo  de un servicio en condiciones privilegiadas. En el caso del Metropolitano, es una ruta de so exclusivo, sin problemas de trafico y con un usuario cautivo minimo que por ahora esta en 400 mil personas por dia.
Por supesto, esta ecuacion no convence  a las empresas que han recibido ese privilegio. Dicen que para su negocio  sea rentable (no estoy muy seguro cual es la dimension de esa rentabilidad, pero bueno...) necesitan 700.000 usuarios por dia y no tener competencia por su ruta. Es posible que esto sea asi pero la solucion  ha debido llegar  por otras vias. Y hacen uso de su creatividad, con una buena dosis  de cinismo, al decir que fue una decision democratica. Poque  aumentar el costo del doleto termina siendo una desicion unilateral. Inaceptable desde el punto de vista de la ciudad.
Pero estos antecedentes, tampoco son excusa para la actuacion de la autoridad municipal, la que debio saber desde el primer dia que tarde o temprano llegariamos a una  situacion  como la e hoy. Pero no hubo prevision. ? Que esperaban?  ? Que la empresa  deje de actuar  como empresa y piense en l beneficio de todos los usuarios? ? O creian  que con decir " los pasajes no van a subir" seria suficiente?.
Y mientras ellos se peleaban  (la Municipalidad ahora econoce  que todavia no tiene los argumentos legales para proceder) los usuarios seguiremos  padeciendo  un servicio combi. Con lo que la promesa  de ofrecer un transporte moderno para la gran ciudad de Lima sigue pendiente.
Entretanto, me pregunto si los usuarios tienen el derecho de demandar a las empresas. Leyendo  la Ordenanza 873 que aprueba  el reglamento de operaciones, leo el articulo 30 que habla de los derechos  de los usuarios. A saber: qu tenemos derecho " a ser transportados  en condiciones apropiadas" y a " exigir el cumplimiento  de parametro de calidad".