martes, 9 de junio de 2015

GASPAR NÚÑEZ DE ARCE, AMIGO DE RICARDO PALMA


José Zorrilla y Núñez de Arce, son dos líricos españoles naturales de Valladolid. Estos dos poetas han alcanzado resonancia en el siglo XIX. José Zorrilla había nacido en 1817 y Núñez de Arce, en 1834.
Ricardo Palma cuenta que Don Gaspar eran desde tiempo antiguo grandes amigos, habían intercambiado muchas cartas. Se encontraba don Ricardo en Madrid, y cierto día se encontrada en el hotel listo para salir a buscar a su buen amigo, cuando por sorpresa llegó su amigo. Simpática, muy simpática fisonomía la del poeta. “Pequeño y débil de cuerpo: barba recortada que empieza  ya a blanquear, ojos vivaces, llenos de expresión y voz en la que se adivina temperamento extremadamente nervioso”, este es Gaspar Núñez de Arce, el tan justamente admirado cantor de Raimundo Lullo, de la Lamentación de Byron y de los Gritos del Combate; el autor del delicado Idilio, tan recitado en nuestra América por grandes poetisas. Al verlo por primera vez encontré de indisputable estos conceptos de Revilla: “El espíritu de Núñez de Arce habita, como el de Napoleón, en pequeño y endeble cuerpo. Pues sin duda  la naturaleza gastó tanta cantidad de fuerza en producir el organismo psíquico que no le quedó la suficiente para los demás”.
Núñez de Arce no es un orador “ni pretende serlo”, aunque su palabra es fácil y correcta, la irritabilidad de sus nervios lo colocaría en terreno desventajoso para la réplica. Aunque ha sido diputado y senador, y ministro, es demasiado gran poeta para vivir en la política  militante. Hoy “politiquea entre los sagastinos”, pero solo como aficionado; que dejaría de ser español si renunciara  por completo a la olla podrida de la política.
En literatura y política, don Gaspar, es un poco intransigente con las ideas opuestas a las suyas y eso que es liberal. Cuando oye  una alusión desfavorable, por insignificante y embozada que sea contra la Academia Española, que, en verdad, no es corporación impecable, su intolerancia desaparece para convertirse en fanatismo de sectario. El poeta tiene la sangre caliente.
Núñez de Arce tuvo por predecesores, en el sillón académico que hoy ocupa, al filósofo Jaime Balmes y al poeta José Joaquín  de Mora.
Sigue contando Ricardo Palma, “que hay un escritor de brillantísimas dotes, de frase humorística  a la vez que sentida, el cual en las sesiones del Congreso Literario, no despreciaba oportunidad para zarandear, más que a la Academia,  a media docena de académicos que él estimas como entrados por la ventana de la casa de Valverde. Este literato y tribuno, con aspecto de cabecilla carlista, pero con ideas y hechos de exaltado radical, es Pepe Zahonero. Apenas  lanzaba un dardo, cuando sobre exaltado don Gaspar  se aprestaba a romper lanzas. Trabajillo le costaba  a Zahonero tranquilizarlo, prodigándole frases justicieras a la vez que cariñosas”.
Cuenta Palma que en el Congreso Literario pidió la palabra el capitán de la bohemia madrileña literaria  señor Echegaray, que presidia la sesión, le advirtió que solo podía hacer uso de la palabra veinte minutos, según articulo reglamentario. “siento señores – dijo Zahonero- , que la grande y elevada figura del señor Echagaray, tenga en estos momentos, más qwue la campanilla tan apremiante como la de jefe de estación, y que señalando breve tiempo para nuestros discursos, diga cosa parecía a esta: “!Viajeros al tren, que el tren va a marchar!” Su señoría se apoya en el reglamento; si un reglamento obra del ilustre autócrata  don Gaspar Núñez de Arce, hombre dulce y eminentísimo poeta, y que por lo tanto no puede salir muy airoso con su papel de tirano(se dice que don Gaspar  hizo un movimiento como para interrumpir al orador, y este dirigiéndose a él continuo). “Ilustre señor Núñez de Arce, a quien ya llamo el único viviente  representante de la lira  épica en España, el poeta de más profundo concepto y más grande fantasia, sepa vuestra majestad  que, para ocuparnos del tema en discusión, son mezquinos los veinte minutos que marca ese reglamento que, obra de la misma pluma que escribió  “La visión de fray Martín, es hermano bastardo  de ésta”.
El poeta sonrió  y sus nervios se calmaron. Es Zahonero diestro en administrar valeriana. 
En otra sesión Zahonero dijo: Si por voto de los hombres de letras se hiciera la elección de académicos, no estarían en la academia muchos de los que están. (El señor Núñez de Arce, murmura). “Tranquilicese su señoría, que con su señoría no va nada. No le habrían  de faltar votos,  pues además del de los hombres tendría el de las mujeres”.
¿Cómo conservar arrugado el entrecejo después de escuchar tal piropo?. El académico se humanizo.
La gran pesadilla de Zahonero parece ser hablar siempre contra la Academia “Los académicos afamados han valido mucho antes de serlo: pero después  (“!esto es sangriento!...”interrumpió  don Gaspar) ¿Sangriento señor Núñez de Arce?- continuo el orador. Cuanto más será la sangre  que produce en la epidermis la picadura de un alfiler. Su señoría, por ejemplo era poeta y es poeta, antes de entrar en la Academia. Que conste que me ha azarado bastante la interrupción del señor Núñez; porque cuando su señoría  interrumpe, como no sea con un apostrofé épico, no es posible contestarle”.
En síntesis don Gaspar Núñez de Arce, el gran poeta, en relación con el mundo externo, goza en vida de anticipada inmortalidad literaria, no es menos fascinador  en su trato íntimo. Visitar a Núñez de Arce y no sentirse cautivado por su expansiva llaneza y por su exquisita  amabilidades punto menos que imposible. Es de los hombres que se imponen al cariño universal.
Palma visito en su casa, a Núñez de Arce, tres o cuatro veces, él vivía en la cal le del Sacramento, hogar elegante y modesto, en el que abundan los objetos de arte, esculturas y cuadros de notables artistas contemporáneos, y que representan escenas descritas por el ilustre poeta  en sus poemas. Una escultura de La visión de Fray Martín “me pareció maravillosa”.
En su hogar vive con su excelente esposa y un niño sobrino de esta, quien el poeta mima como si fuera su hijo. “Los grandes literatos en España son seres nada reproductivos, no dan súbditos a la monarquía”. La mayoría de estos poetas no tienen a quien legar su glorioso apellido. “Ellos dirán, quizá aún hartos  hijos han dado vida con las producciones de su cerebro, y que valga lo uno por lo otro.
Cuando en los primeros momentos en que se trata a don Gaspar, parece hombre de carácter adusto; al poco rato de estar hablando con él, aflora la sinceridad y la llaneza expansiva del castellano viejo se manifiestan sin embozo. Es una inteligencia poderosa, teniendo un corazón de oro. En su alma no cabe mezquindad alguna, ni siquiera la del desdén. Núñez de Arce es un poeta  muy admirado en España y en América.

Muy galante, y trovador. En política como ya se ha apuntado, no es hoy un luchador y eso que lo fue, y no de los ardorosos. Sus “.  Gritos del combate”,  lo comprueban. Todavía hay gente en Madrid que recuerda sus endecasílabos, a la muerte de Ríos Rosas,  endecasílabos  que tienen el temple  del acero toledano y que produjeron un popular tumulto. Don Gaspar  fue gobierno revolucionario y triunfador en Barcelona; fue diputado, fue ministro. Fue en fin, en política, todo lo que quiso. Núñez de Arce esta desencantado de los hombres y de los ideales políticos, tememos que decir que es un caballero leal para con los amigos.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                      

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